Siempre aparece un ángel...

El sábado por la noche, hablaba de lo sola que me sentía, intentaba gritar a los cuatro vientos o  escribirlo al menos a tres lo harta que estaba.  Comentaba la innata sensación de "necesitar" del propio ser humano mezclada con mi propia incapacidad de expresar ese sentimiento. No exageré en absoluto. Yo soy así.

El domingo no me levanté hasta cerca de las 16 horas. No tenía hambre. Nadie me esperaba. No tenía ganas de hacer nada. Tomé un vaso de leche y sin quitarme el pijama me tumbé en el sofá donde me tragué dos pelis de sobremesa seguidas. El sábado lloré lo suficiente como para agotar mis lágrimas, así que el domingo sencillamente estaba ausente... Sí, fueron horas de auténtico autismo.

Y cuando sin ni tan siquiera pensar ya sentía ese domingo como otro domigo de mierda, de esos que me persiguen últimamente mi teléfono sónó. Era Dálmata! Mi amiga del alma que desde hace un tiempo vive en el culo del mundo, allá donde nacen los Pirineos. Hacía tanto tiempo que no hablábamos!! Mantuvimos al menos una hora de conversación, que yo no sé qué, que si tú no sé cuantos, que si que triste esto, que si jajaja con lo otro... No sé, una mezcla que si no me levantó, al menos me motivó y me hizo sonreir.

Es extraño, es como si siempre hubiese un "ángel" que percibe nuestras sensaciones y sentimientos, que aparece justo en el momento más oportuno sin tan siquiera llamarlo. Y sí, ella fue mi "ángel" particular una vez más, quizá sin saberlo, quizá sin pensarlo, quizá sin proponérselo. Pero es el arte de la magia que sostiene la base de algunas amistades que probablemenete de una forma u otra duren eternamente. Porque lo sano y lo verdadero nunca caduca.

En dos findes estará por aquí, así que espero poder verla y darle un buen abrazo.

Y mientras tanto, a seguir remontando. Hoy por circusntancias de la vida y después de tantos meses he tenido que "pisar" el pueblo de LOVER. No creo que vuelva a hacerlo en mucho tiempo, demasidos recuerdos y cosas que aún quedan por asimilar. Y aún sin verla, la he sentido de nuevo algo más cerca...